¡Ya viene el Equinoccio! y nada como ir a cargarse de energía vestidos de blanco. Tengas o no tengas plan, El Barrio te recomienda que te des una vuelta por la Pirámide de Corregidora.
Ahí, hay una zona arqueológica a cargo del INAH, en donde puedes entrar y caminar hasta su explanada. No se permite subir por el tema de conservación, pero sin duda, es tan bonita y majestuosa como la de Chichén Itzá.
Después de visitar la Pirámide, puedes pasar al Museo de Sitio que está ahí mismo para conocer un poco más sobre la historia de este mágico lugar.
Y ya que estás ahí cerca, puedes darte una vuelta a la Plaza Gran Cué donde recién pusieron la escultura de un buey monumental, uno de los símbolos en torno a las tradicionales Fiestas de Febrero en honor a la Virgen de El Pueblito y que fueron declaradas como Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado de Querétaro.
Después de tomarte la foto con la escultura del buey, puedes visitar el mercadito artesanal que se pone en la plaza justo con motivo del Equinoccio, por esos días también se estará llevando a cabo el Mariachela en el Lienzo Charro.