Un decidido paso el que dio el Ayuntamiento de Corregidora al aprobar los lineamientos con los que se regula el uso de la pirotecnia, tanto en cantidades (no más de una gruesa, 144 cuetes), y horarios (no más allá de las 10 de la noche), así como la responsabilidad que asumen quienes manejen estos artefactos y la capacitación que estarán obligados a tomar. Seguro que lo replican en otros lugares y es el preámbulo de las tradiciones sin riesgo. Bien ahí.